jueves, 28 de enero de 2010

El empleador de fondo solitario

El empleador de fondo solitario es una firma en un contrato de tres meses, que aspira a poner su nombre indefinido en la vida de un empleado enjaulado en una pantalla windows.

Pestañeo.

El empleador de fondo solitario confía en que su estrategia de negocio cale hondo en alguien ajeno a sus nubes, que quizás sólo aspire a llegar al 31 con pasta en la cazuela y en los bolsillos o comprarse a fin de año una Ipad y, en la mayoría de los casos, piense en rellenar con su cuenta del banco una superficie hipotecada de 60 metros cuadrados.

Pestañeo.

Cuando los balances acucian al empleador de fondo solitario el currito, que se mantiene fiel a su pantalla windows, lo percibe como una amenaza que le traspasa como un rayo y agacha el corazón, esperando no ser elegido para el sacrificio.

El empleador de fondo solitario (especie en extinción, por otra parte) se pone unos auriculares, con el Nessum Dorma como fondo de pantalla, y sale a pasear por el parque más cercano intentando buscar una solución en los árboles de invierno. Se da cuenta de que, como ellos hace tiempo ya sin hojas, ha de hacer caer por huevos alguna de las suyas para mantener en pie sus ilusiones numéricas.

Mientras tanto, el empleado (yo, tú, él, nosotros, vosotros, ellos) forrado de titulares agoreros en la prensa salmón, cifras, pagos e incierto futuro a corto plazo, se encierra en sí y no es capaz de pensar en soluciones a una hora de distancia.

Empleadores haylos con tijeretazos de cláusulas, sin escrúpulos ni auriculares que valgan que, cuando sobrevienen los números bajo cero, no miran a las ramas peladas de los árboles, ni hacen análisis d.a.f.o con alternativas, siendo su banda sonora el cortar el grifo por lo sano, sin medias tintas, poniendo punto final a una partitura sin dacapos en la salida.

Es rara avis el empleador de fondo solitario, ya que los parámetros del capitalismo han plantado a los negocios como proyectos que empiezan y acaban tan rápidos como el amor fou.

Pestañeo.

Quizás alguien debería plantar en algún parque el brote verde de un árbol, haciéndole cosquillas al cielo, para este idealista metido a jefe de su empresa y responsable de la factura del banco de quien (yo, tú, él, nosotros, vosotros, ellos) sólo tiene ojos para los emails urgentes que tiene que gestionar vía outlook.

Doble pestañeo.

Dedicado....

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