miércoles, 6 de agosto de 2008

los botones no siempre tienen un ojal que les ciña sin hacerles daño

las decisiones extremas hacen que personas y cosas se consuman en su propio fuego...para muestra, el botón de hoy.

es por ello que a veces no estaría mal entrar en la lavadora con el resto de la colada y centrifugarnos hasta llegar a un punto medio en el que no nos quememos a lo bonzo sin darnos cuenta.

hay un costurero lleno de botones sueltos como ejemplo de ojales demasiado grandes para acogerlos o demasiado pequeños para que encajen.

bss y abrzs

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Quizá la solución sea añadir suavizante,para que los ojales encajen. Abrazos varios.

Anónimo dijo...

ay. botones, ojales, agujas, hilo.. mira que parece fácil la cosa y no debería ser tan difícil encajarlos.. pero como los humanos somos así complicamos en extremo lo que debería ser, nunca mejor dicho, coser y cantar..

un besote sinfonetis.. :)

sinfonía agridulce dijo...

-caminante de las estrellas: el suavizante siempre es bueno, pero quien quita las manchas es el detergente ;) bss

-taña: algún día tendrás q hacerme una recopilación de todas los nombres q me pones. botones y ojales, metáfora de tantas cosas...bss

abrazos

Anónimo dijo...

los botones cobran tamaño y existencia según los estás buscando